Don't feed the troll

Aunque la Navidad nos inunda los corazones  (a la mayoría) y nos volvemos buenos, adorables y bondadosos, desde Influencity hemos querido elevar a mantra un tema que los tuiteros sabemos a base de bien: no alimentéis al troll. Vamos a empezar por el principio, como diría aquel. ¿Qué es un troll? Una persona a la que le encanta criticar en redes sociales, caiga quien caiga y pese a quien pese. Los trolls deben existir y tener su espacio. Conocemos a algunos adorables aunque ellos no lo quieran ser. Otros, no tanto.  Sabemos que existen pero ojo, una cosa es que todos debemos habitar en paz y armonía y otra dar razones al enemigo.

Los trolls muchas veces surgen como una alarma, un aviso de que las cosas no se están haciendo bien en redes sociales. Y a muchas marcas les da mucha rabia por dos motivos: porque es verdad y no quiere que nadie lo sepa, y porque no lo controlan. ¡Ay amigos! es que la época de la unidireccionalidad ya pasó hace años. Ahora tienen mucho más poder los usuarios que las propias marcas.

¿Y entonces qué hacemos?, se preguntarán algunos. Y no sólo marcas. Porque los trolls tienen para todos… Pues muy fácil, hacer las cosas bien. Ante todo saber muy bien en la era en la que nos encontramos. Todo se basa en el feedback y en escuchar, mucho. El siguiente paso es estudiar detalladamente cada red social. Saber por qué estamos en cada una de ellas y pensar qué podemos aportar a cada una.

A partir de ahí, todo flluye. Porque no les damos argumentos a los trolls. Y si aún así brotan, serán mínimos. Y si se dan, se deben llevar a conversaciones, no discusiones. A veces serán duras, pero será un diálogo al fin y al cabo. Pero lo más importante es no dar razones para entrar en combate. A veces en la ofi leemos el timeline como si de un partido del Mundial se tratara. Lo vemos venir, lo vemos venir, tuitean, silencio de la marca, el troll se lo piensa y… ¡goooool! Y, por eso, para recordarlo en todo momento hemos hecho pegatinas y chapas por doquier. ¿No tienes la tuya? #Dontfeedthetroll