Cuando se trata de trabajar con influencers, más grande no siempre significa mejor. El mero hecho de que un influencer tenga un gran número de seguidores no significa que sea el más adecuado para tu marca o agencia. A la hora de realizar campañas de influencer marketing, existen muchos factores en juego. Por ejemplo, llegar a un público adecuado con el mensaje correcto, colaborar con un influencer que represente a la marca y conseguir métricas favorables durante y después de la colaboración. Por estas razones, muchas veces los microinfluencers son los perfiles más beneficiosos e interesantes si buscamos una campaña exitosa.
Si te diriges a un nicho específico, colaborar con un microinfluencer puede ser la mejor opción. Aunque a menudo se les asocia con sectores muy concretos o especializados, sus colaboraciones con grandes marcas demuestran que su impacto va más allá de estos límites. Generalmente, las campañas con microinfluencers tienden a ser más exitosas, especialmente cuando se enfocan en audiencias específicas. De hecho, muchas empresas que han trabajado con microinfluencers han descubierto que generan niveles de conciencia, confianza y engagement mucho mayores que los que obtienen al colaborar con perfiles más grandes.
Los microinfluencers no solo son igual de eficaces a la hora de promocionar negocios pequeños con presupuestos ajustados, sino que pueden beneficiar a negocios de todas las formas y tamaños. Quizá te sorprenda descubrir que varias marcas internacionales invierten millones de dólares en microinfluencers en vez de depender exclusivamente de unas cuantas celebrities. ¿A qué se debe? Existen muchas razones para trabajar con microinfluencers, conócelas a continuación.
Debido a que los microinfluencers tienen audiencias más pequeñas, disfrutan de una alta participación de sus seguidores y generan conexiones más cercanas con sus seguidores. A diferencia de otros tipos de influencers, sus comunidades no son ni tan pequeñas como las de los nanoinfluencers o excesivamente grandes o despersonalizadas como las de los macroinfluencers. De hecho, para las marcas colaborar con este tipo de influencers puede resultarles muy interesante, ya que pueden influir en sectores especializados. Sin embargo, hay muchas otras razones por las que trabajar con micro influencers puede ser atractivo. A continuación, te las detallamos una por una:
Los microinfluencers generan tasas de engagement significativamente más altas que los influencers con audiencias más grandes. Según un reporte de Influencer Hub, en Instagram un microinfluencer tiene un engagement rate promedio de 3.86%, mientras que un macroinfluencer solo alcanza un 1.36%. Esta diferencia es aún más pronunciada en plataformas como TikTok, donde los microinfluencers logran un engagement aproximado de 17.96%, en comparación con el 6.20% de los macroinfluencers que tienen entre 500,000 y 1 millón de seguidores.
Estos datos demuestran cuantitativamente la capacidad superior de los microinfluencers para generar interacciones y conexiones más profundas con sus audiencias. Por este motivo, consiguen altos niveles de interacción en sus publicaciones. Esto se traduce en más comentarios, likes y compartidos que impactan positivamente en la visibilidad de las campañas realizadas con las marcas.
Gracias a la confianza que los microinfluencers han logrado entre sus seguidores, las recomendaciones de productos o servicios son muyefectivas. Es decir, una marca colaboradora tiene posibilidades de impulsar sus ventas y conseguir futuros clientes fidelizados gracias a una colaboración con microinfluencers. En términos simples, esto deriva en un ROI alto y una devolución de la inversión saludable y estable.
No son celebridades ni mega influencers, así que es fácil identificarse con ellos. Sus seguidores suelen confiar en sus recomendaciones y en sus opiniones auténticas. Gracias a su especialización en temas concretos, conectan con seguidores interesados en un nicho específico. Esto permite a las marcas transmitir su mensaje de forma precisa y coherente con un contenido relevante y un alto impacto en el público.
Si te preguntas cuánto cobra un microinfluencer, debes saber que sus tarifas suelen ser más bajas que las de grandes influencers. Según datos de la industria, un microinfluencer en Instagram (con 10,000-50,000 seguidores) cobra en promedio entre $100 y $500 por publicación. En contraste, un macroinfluencer (100,000-500,000 seguidores) puede cobrar entre $5,000 y $10,000 por post. Esto permite realizar una inversión más rentable y la posibilidad de diversificar campañas con varios microinfluencers.
Los microinfluencers cuentan con audiencias segmentadas, lo que facilita el alcance hacia un público bien definido y concreto. Asimismo, esto aumenta la efectividad y la rentabilidad de las campañas con marcas colaboradoras. Por ejemplo, si una marca de cosmética realiza una campaña sobre un producto capilar para rizos, un microinfluencer dedicado a hacer contenido sobre el método curly es perfecto, ya que cuenta con una comunidad específica e interesada en el tema.
Colaborar con microinfluencers puede fortalecer la credibilidad y posicionamiento de tu marca gracias a su autenticidad. Una campaña con un microinfluencer genera una imagen cercana y confiable que resuena con los consumidores actuales, los seguidores de la marca y los futuros clientes que vas a conseguir.
Este tipo de creadores de contenidos suelen comunicarse de forma directa y cercana con sus comunidades. Los seguidores lo notan y participan de una interacción más personal y enriquecida. De hecho, muchos microinfluencers de Instagram hacen vídeos en directo o streamings en otras plataformas. Otros organizan sesiones de preguntas y respuestas en Instagram Live, creando un espacio donde los seguidores se sienten cómodos interactuando.
Los microinfluencers pueden llegar a convertirse en embajadores de marca leales. No pierdas de vista que establecer colaboraciones duraderas beneficia a ambas partes: tanto la marca como el influencer pueden disfrutar de una asociación genuina y sostenible en el tiempo.
Un ejemplo de microinfluencer y embajadora de marca es la periodista y escritora, Lorena Córcoles (@lorenacorcoles), quien tiene casi 15 mil seguidores en su cuenta de Instagram. Su perfil, enfocado en moda, belleza y estilo de vida, la ha llevado a colaborar con diversas marcas del sector - como @n2naturalnutrition, con quien colabora recomendando sus productos de suplementación alimentaria.
No todos los microinfluencers lo hacen, pero muchos de ellos aceptan colaboraciones a cambio de productos o tarifas reducidas. Además, el contacto con ellos suele ser más directo, rápido y fluido, pues muchos trabajan sin agencias ni representantes o lo hacen con agencias pequeñas.
Como ya hemos comentado, los microinfluencers pueden ser perfiles interesantes para negocios de todos los tamaños, no sólo para pequeñas marcas. Te podría sorprender saber que varias marcas internacionales han colaborado con microinfluencers para conectar con sus audiencias objetivo. Echemos un vistazo a algunas de estas empresas..
La sección de audiolibros de Amazon, Audible, es una de muchas marcas globales que trabajan con microinfluencers. Un ejemplo destacado fue la colaboración de Audible Canadá con el influencer Jesse Driftwood. Cuando ambos trabajaron juntos, Jesse todavía era un microinfluencer. Promocionó a la marca en Instagram con una publicación sobre su pasión por el running. Gracias a la simplicidad y autenticidad de sus posts sobre Audible, Jesse fue capaz de aumentar exponencialmente la conciencia de marca de la empresa de una manera creativa.
En el caso de España, Audible también realiza algunas colaboraciones con microinfluencers. En este reel publicado por la pedagoga y microinfluencer Noelia Galán, ella recomienda una serie de True Crime en el área de podcasts de la plataforma. Además, invita al público a participar de un sorteo y un misterioso juego organizado por Audible.
Coca-Cola ha confiado en las promociones de celebridades desde 1900. Sin embargo, últimamente, el productor de bebidas más grande del mundo ha empezado a dedicar parte de sus esfuerzos de marketing a campañas con microinfluencers.
Por ejemplo, hace poco Coca-Cola eligió a influencers y creadores de contenido de Instagram como embajadores de la marca. El gigante global seleccionó a microinfluencers de las áreas de viajes, comida, deporte y moda para que compartieran el auténtico placer de las bebidas de Coca-Cola.
Este es un ejemplo de una de las colaboraciones con microinfluencers, pero en las oficinas de Chile. Se trata de este vídeo de la cantante, gamer y streamer Seshany. En él, la microinfluencer disfruta de Coca-Cola mientras juega con realidad virtual, invitando a participar de la campaña #Enciendetumagia.
Guillette, el fabricante de cuchillas, ha sido un nombre familiar generación tras generación. Sin embargo, la empresa se dio cuenta de que necesitaba cambiar su enfoque de marketing si quería continuar su legado y ser atractiva para la Generación Z. Para conseguir conciencia de marca entre las generaciones más jóvenes, la empresa ha colaborado con microinfluencers de belleza que promocionan su línea de productos Venus de manera moderna e interesante.
La campaña presenta a microinfluencers usando productos Venus en escenarios cotidianos, no en sets comerciales fabricados. Esto le proporciona un nivel de autenticidad que resuena con las generaciones jóvenes, las cuales tienden a ser más reacias a las promociones patrocinadas. En un principio, la campaña obtuvo unos resultados impresionantes: una tasa de engagement promedio del 2,2 % en las primeras 1000 publicaciones de Instagram etiquetadas.
Este es un ejemplo de las publicaciones colaborativas que todavía hacen los microinfluencers con Gillette. En este reel, la influencer Nayah Lobo enseña las bondades de los productos de Gillette Venus.
La marca barcelonesa de gafas de sol Meller ha desarrollado una comunidad leal en Instagram, en gran parte gracias a sus colaboraciones regulares con microinfluencers. De hecho, la marca ha crecido de la mano con su estrategia de influencer marketing desde que se fundó en 2014. Tanto es así que Meller tiene una sección en su web dedicada a los creadores de contenido y a los microinfluencers con los que trabaja.
En su Instagram, postean compilados de fotografías que los propios microinfluencers han subido previamente. En esta publicación, por ejemplo, la mayoría de personas etiquetadas son microinfluencers especializados en diseño, moda y lifestyle.
Por último, Sephora también aprovechó los beneficios de colaborar con microinfluencers con su programa #SephoraSquad. Inicialmente, la marca contrató a 73 influencers de belleza con seguidores consolidados. El objetivo era que publicaran contenido sobre los productos de Sephora y compartieran reseñas honestas y sin filtros mientras que recibían beneficios como productos gratis o muestras. Como resultado de la campaña, la empresa reportó un aumento de ventas y de engagement después de solo 1600 publicaciones de Instagram. Desde entonces, Sephora abre un período de aplicaciones para ser parte de Sephora Squad. En esta foto tienes un ejemplo de una de las candidatas, la microinfluencer Daphine Bush.
Ahora que ya conoces las múltiples ventajas de colaborar con microinfluencers, ¿a qué esperas? Comienza a construir una nueva campaña de marketing de la mano de creadores de contenido auténticos y talentosos.