Estamos en una época de magia, de regalos y de decir la verdad. Así que hemos pensado que sería oportuno desvelar qué es lo que la mayoría de influencers lleva en su bolso (véase, maletas, bolsillos, bandoleras, mariconeras o incluso calcetines). ¡Quién sabe! Puede que descubriendo algunos secretillos e imitándolos o pidiendo alguna que otra cosa a los Reyes Magos, quienes aspiran a crear y compartir en la red puedan lograr el éxito de quienes admiran -que cada uno les ponga nombre-.
Como todos, os habéis cansado de preguntaros cómo algunas personas pueden hacer esas fotos, desayunar esos manjares, vestir esas prendas, sonreír en todo momento, aprovechar los rayos de sol en la inclinación perfecta, tener el don de la palabra, estar en todos los eventos, conocer a tanta gente, ser tan simpáticos, tener grandes ideas, publicar tanto, coleccionar tal cantidad de ‘me gustas’ y retuits en tan pocos minutos…
Bien, la respuesta está en sus bolsos (y variantes). Todos, absolutamente todos, llevan consigo:
Sí, estáis en lo cierto, aunque siempre decimos que un influencer no se autodesigna, sino que lo hace la comunidad, lo cierto es que gran parte de su éxito reside en su bolso. Y nos hemos enterado que estas Navidades algunos comercios ya venden los packs completos, sabedores de que estamos en la era del influencer. De este modo, 2015 se presenta como un año de explosión total ya que no hará falta pasar años y años recopilando cada elemento mágico para meterlo en la saca… Lo que viene siendo el bolso de Mary Poppins y es mágico por lo que contiene pero también por su exterior, por su tamaño. Nadie diría que lo es a simple vista y eso mola.
Y una vez nos hemos cansado de decir tonterías, la verdad es que el bolso de un influencer suele pesar quintales. En su parte física podemos encontrar un móvil, una tablet, una batería de repuesto, un cargador portátil, un espejito, un estuchito con pinturas de emergencia, una libreta y un boli para tomar notas, tarjetas de visita y algún que otro libro de vez en cuando.
Pero hay otra parte, la intangible que es la que pesa de verdad y contiene un saco de ideas invisibles, de imágenes inspiradoras y conversaciones mantenidas y pendientes. Esa otra versión de bolso, sin asas ni cremalleras, está en la cabeza y el corazón y se alimenta de pasión y organización a partes iguales.
Podremos desear objetos y descargar aplicaciones o comprar complementos que nos ayuden a crear y mejorar en el camino creativo en las redes, a facilitar nuestra presencia en ellas. De hecho, es un acto de responsabilidad saber elegir e invertir en ellos. Pero si fuera posible pedirlo en nuestras cartas mágicas, la originalidad, la constancia, la ilusión y la empatía serían deseos más que acertados para completar el perfil de influencer día a día.
¡Llenad vuestros bolsos y perseverad en el camino! Lo mejor está por venir y en Influencity seguiremos trabajando con entusiasmo y ahínco para ofrecéroslo.